Nueva York.- El exdirector de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), John Brennan, reafirmó que la colusión entre Rusia y la campaña del presidente Donald Trump es innegable, y que solo queda determinar si puede derivar en cargos criminales.
En una columna publicada en el sitio de internet del diario The New York Times, Brennan, a quien el presidente revocó la víspera su autorización a informes de alta seguridad del gobierno federal, indicó que “las afirmaciones de Trump de que no existió colusión son patrañas”.
“Las únicas preguntas que quedan son si la colusión que tuvo lugar constituyó una conspiración de la cual deriven cargos criminales”, destacó Brennan, quien encabezó la CIA de 2013 a 2017. Añadió asimismo que también existió obstrucción de la justicia de parte de la campaña de Trump.
Precisó que sólo faltaba determinar si esa “obstrucción de la justicia se produjo para encubrir cualquier tipo de colusión o conspiración, y cuántos miembros de 'Trump Incorporated' intentaron defraudar al gobierno al lavar y ocultar la entrada de dinero a sus bolsillos”.
Como ejemplos, Brennan citó que un jurado delibera en torno a fincar cargos de fraude bancario y fiscal contra Paul Manafort, exdirector de campaña de Trump; además de que el exvicepresidente de la campaña, Rick Gates, se declaró culpable de fraude financiero y de mentir a investigadores.
Brennan se insertó así en el debate sobre la investigación llevada a cabo por el fiscal especial, Robert Mueller, quien busca determinar precisamente si existió colusión entre Rusia y la campaña de Trump para influir en las elecciones, y si se trató de obstruir la justicia para tratar de encubrir un posible delito.
El exdirector de la CIA, además, renovó con la columna sus críticas al presidente. Por ello, de acuerdo con el propio Brennan, la Casa Blanca decidió revocar su autorización a informes de seguridad.
“Trump claramente se ha tornado más desesperado por protegerse a sí mismo y a los que están cerca de él, por lo que tomó la decisión políticamente motivada de revocar mi autorización de seguridad en un intento de asustar y callar a otros que pudieran desafiarlo”, declaró.
Brennan recordó que desde 2016 eran claros los esfuerzos de Rusia por influir en las elecciones de Estados Unidos, y que éstos planes eran autorizados directamente por el presidente Vladimir Putin. Además, aseveró, era también usual que este gobierno negara su involucramiento.
En ese ambiente, Brennan criticó el llamado público que hizo el entonces candidato Trump en julio de 2016 para que Rusia encontrara correos electrónicos que su rival, Hillary Clinton, supuestamente había eliminado de su servidor.
“Al emitir tal declaración, Trump no solo alentaba a una nación extranjera a recopilar información de inteligencia contra un ciudadano estadunidense, sino que también autorizaba abiertamente a sus seguidores a trabajar con nuestro principal adversario global contra su oponente”, explicó Brennan.