TEHERÁN. El comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria de Irán, el general Hosein Salamí, advirtió a los jóvenes que protestan que hoy es el último día de los disturbios y les pidió que no salgan a la calle para no arruinar su futuro.

"Hoy es el fin de los disturbios. No salgan a la calle más", dijo el líder de la poderosa fuerza de élite, cuya misión es salvaguardar el sistema teocrático de la República Islámica.

"Esta sedición no tendrá un final feliz para vosotros. No arruinéis vuestro futuro", advirtió el general.

Irán vive protestas desde la muerte el 16 de septiembre de Amini tras ser detenida tres días antes por la Policía de la moral por llevar mal puesto el velo islámico, unas movilizaciones protagonizadas por jóvenes en las que se pide el fin de la República Islámica.

Salamí afirmó son una conspiración de "Estados Unidos, Reino Unido, Arabia Saudí y el régimen sionista", es decir Israel, y dijo a los jóvenes "que están siendo engañados".

Las fuerzas de seguridad iraníes atacaron la madrugada de ayer un hospital y una residencia universitaria en el oeste del país, según informaron activistas, en momentos en que el movimiento de protesta en Irán entra en su séptima semana.

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Las protestas por la muerte de Amini están protagonizadas sobre todo por jóvenes y mujeres al grito de "¡Mujer, vida, libertad!" que lanzan consignas contra el Gobierno y queman velos, uno de los símbolos de la República Islámica.

Las movilizaciones han ido evolucionando desde su comienzo en septiembre y en las últimas semanas estaban centradas en universidades en pequeños grupos.