Julian Assange es víctima de una persecución política, la cual se está ejecutando mediante una cadena de golpes internacionales para amordazar el periodismo de investigación, denunció el portavoz de WikiLeaks, Kristinn Hrafnsson.
En un encuentro con miembros de la Asociación de Prensa Internacional de Londres (FPA), Kristinn Hrafnsson calificó la situación de Assange como una persecución y "no una acusación a un individuo o un medio de comunicación".
El caso de Assange es un precedente, que está enviando una señal a otros casos con periodistas de Australia y de California que se dedican al periodismo de investigación sobre asuntos de seguridad nacional, señaló Hrafnsson, de acuerdo con el diario australiano The Herald Sun.
Llamó a la comunidad internacional a apoyar a Assange, lo que significa defender no sólo al periodista, sino también a la libertad de prensa en general.
Señaló, por otra parte, que Assange, quien se encuentra en la cárcel londinense de Belmarsh, fue revisado por un terapeuta y un psiquiatra por afectaciones a su salud, tras permanecer siete años en la embajada de Ecuador en Londres, donde se encontraba asilado, sin recibir atención médica.
Assange, quien fue trasladado a una unidad médica debido a problemas de salud, entiende muy bien que le espera una batalla larga y tuvo tiempo para elaborar su línea de defensa, agregó.
El fundador de WikiLeaks, a quien el gobierno ecuatoriano le retiró el asilo, cumple una sentencia de 50 semanas de cárcel por violar las condiciones de la libertad condicional otorgada por la justicia británica en 2012.
Por otro lado, Hrafnsson señaló que las autoridades de Estados Unidos presentarán el próximo viernes ante la justicia británica las pruebas que disponen para apoyar su solicitud de extradición de Assange.
Explicó que para ese día está prevista una audiencia ante el tribunal londinense de Westminster, en la cual Assange podría estar presente a través de una videoconferencia, ya que la sesión se dedicará sólo a cuestiones de procedimiento.
Por lo que una primera confrontación de argumentos entre las autoridades estadunidenses y la defensa del fundador de WikiLeaks se llevaría a cabo dentro de varias semanas o incluso meses.
Estados Unidos busca juzgar a Assange por 18 cargos relacionados a la divulgación, mediante WikiLeaks, documentos militares y diplomáticos clasificados.
Este martes, Assange fue visitado por su padre John Shipton y el reconocido artista disidente chino Ai Weiwei.
De acuerdo con Shipton, su hijo perdió peso y pese a que está sometido a mucho estrés "mantiene la fuerza del espíritu", indicó el diario británico Evening Standard.