PARÍS, Francia. El presidente norteamericano Donald Trump detonó una nueva bomba política contra sus aliados al criticar al gobierno alemán y al proponer que los otros 28 miembros de la OTAN, a los cuales calificó de “delincuentes”, dupliquen sus gastos de defensa para llegar a 4% del PIB.
La sorprendente demanda de Trump, expuesta en la primera jornada de la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Bruselas, Bélgica, parece un objetivo extremadamente difícil de alcanzar.
Sólo cinco de los 29 miembros de la alianza (Estados Unidos, Grecia, Estonia, Gran Bretaña y Letonia) consagran actualmente 2% de Producto Interno Bruto (PIB) al gasto militar. Elevando ostensiblemente las críticas expuestas en los últimos días, Trump aseguró que numerosos miembros “no pagan lo que deberían” y “francamente, muchos países nos deben una enorme cantidad de dinero desde hace muchos años”.
“Son delincuentes, a mi juicio, porque Estados Unidos ha tenido que pagar por ellos”, agregó con una sonrisa durante un desayuno con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, realizado en la residencia del embajador estadounidense en Bélgica. Esa parte del desayuno fue filmada y distribuida a la prensa, lo que permite suponer que se trató de un gesto político deliberado.
A pesar de sus reproches, Trump firmó una declaración conjunta de 79 puntos contenidos en 23 páginas, en la cual los miembros de la OTAN reafirman su “compromiso inquebrantable” de aumentar el gasto militar a 2% del PIB y aseguran que presentarán “planes nacionales creíbles” para implementarlo.
El documento también reitera con dureza la denuncia de la acción rusa en Ucrania: “Condenamos con firmeza la anexión ilegal e ilegítima de Crimea por parte de Rusia, que no reconocemos y no reconoceremos en el futuro”. Esa declaración contrasta con una afirmación de Trump la semana pasada, diciendo que estaba reconsiderando su posición sobre la anexión de Crimea.
Los aliados aprobaron igualmente la creación de la “NATO Readiness Initiative” (Iniciativa de Preparación de la OTAN) concebida para disuadir una agresión rusa en Europa. Ese plan de reacción inmediata, también conocido como “estrategia 30-30-30-30”, permitirá a la Alianza Atlántica reunir una fuerza de combate de 30 batallones terrestres, 30 escuadrones aéreos y 30 barcos de guerra en 30 días, fue concebido para disuadir una agresión rusa en Europa.