El Gobierno estadounidense discutió la posibilidad de que los militares construyan instalaciones para albergar a migrantes detenidos como parte de su nueva misión en la frontera con México, pero la idea fue descartada debido a que el Pentágono expresó dudas al respecto, dijeron funcionarios.
La divulgación de esta situación por parte de los funcionarios estadounidenses, que hablaron con Reuters bajo condición de anonimato, ilustra la tensión dentro del Gobierno por el uso de recursos militares para fortalecer la frontera contra la inmigración ilegal, un tema central para la base de votantes del presidente Donald Trump.
La semana pasada, autoridades anunciaron que más de 7.000 soldados irían a la frontera con México en momentos en que una caravana de migrantes centroamericanos se dirige hacia Estados Unidos.
Las fuerzas militares rechazaron el mes pasado un borrador de propuesta del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés) sobre la construcción de viviendas para migrantes detenidos, en medio de las discusiones iniciales sobre su papel en la frontera, dijeron los funcionarios.
Al expresar su oposición, el Pentágono ayudó a garantizar que la misión militar se limitara a brindar apoyo al personal del gobierno en la frontera, destacaron las fuentes.
El Pentágono no quiso el lunes hacer comentarios sobre las deliberaciones, pero sostuvo que no recibió una solicitud del DHS para construir instalaciones para albergar a migrantes.
Trump dijo la semana pasada que planea construir tiendas de campaña para albergar a los migrantes, que serían retenidos en esas instalaciones mientras el gobierno estudia su solicitud de asilo.