Paris, Francia.- El ministro francés del Interior, Gérard Collomb, confirmó hoy la muerte de tres personas, asesinadas por el autor de la toma de rehenes en un supermercado en Trèbes, al sur de Francia, identificado como Redouane Lakdim.

Las fuerzas del orden francesas abatieron al individuo armado, presunto “soldado” del grupo yihadista Estado Islámico (EI), que se había atrincherado en un supermercado, donde ademas de matar a 3 personas, hirió a varios individuos y mantuvo un rehén inmovilizado durante unas tres horas.

El atacante reclamaba la liberación del terrorista Salam Abdeslam, implicado en los atentados del 13 de noviembre de 2015 que provocaron 130 muertos en París.

La fulminante intervención policial, que duró pocos segundos, se produjo en el mismo momento en que el presidente francés Emmanuel Macron se dirigía al país por televisión para informar sobre la evolución de la situación.

Se trata del primer acto de terrorismo islamista desde que Macron llegó al poder en mayo pasado.

El ministerio del Interior confirmó que, además del terrorista, había dos muertos, pero rehusó proporcionar otras informaciones sobre el episodio. Pese al hermetismo oficial, otras fuentes indicaron que el autor del múltiple ataque sería un marroquí de 25 años fichado por radicalización.

Los servicios de inteligencia trabajaban frenéticamente para confirmar si el atacante —que actuó solo— pertenecía a una red terrorista activa. En una reivindicación oral, se había proclamado “soldado del EI”. Esa definición, según los expertos, significa que actuó en forma espontánea sin vínculos con el movimiento yihadista.

Numerosos destacamentos de elite antiterroristas mantuvieron cercado el edificio y la policía creó un perímetro de seguridad en torno de las instalaciones, sobre todo para evacuar una escuela que se encuentra a 300 metros del supermercado. Al mismo tiempo, tres helicópteros sobrevolaron en forma permanente la zona, a la que también llegaron refuerzos de diversos cuerpos de policías y servicios especiales de gendarmes.

El sangriento episodio comenzó a las 10 de la mañana cuando el presunto terrorista mató al conductor de un automóvil para robarle el vehículo. El agresor utilizó ese coche para trasladarse hasta un cuartel de las fuerzas de seguridad de Carcassone, donde a las 10.30 efectuó cinco disparos contra un grupo de policías que regresaban de una sesión de jogging. Uno de policías fue herido y se encuentra en estado delicado, según informó el sindicato UNSA de la policía.

Desde allí el agresor se dirigió al supermercado, donde efectuó varios disparos al parecer con un fusil de asalto Kalashnikov, según relató uno de los testigos que consiguió huir en el momento de la agresión. En esa acción mató e hirió a otras personas y tomó a un empleado como rehén.

Tanto Macron como el primer ministro francés, Edouard Philippe, indicaron desde el comienzo del ataque que “se trataría de un acto terrorista”.

Francia continúa en alerta tras una serie de atentados

Si se confirma el vínculo con el Estado Islámico, este ataque sería el primero importante desde la elección del presidente Emmanuel Macron en mayo pasado.

La toma de rehenes se registra cuando Francia continúa en alerta tras una serie de atentados desde el ataque contra la sede del semanario satírico Charlie Hebdo en enero de 2015, que dejó 12 muertos.

La ola de atentados yihadistas dejó un total de 238 muertos y cientos de heridos en 2015 y 2016. Varios de esos ataques o intentos de ataque apuntaron a militares o policías.

Las autoridades temen nuevos atentados a pesar del incremento de las medidas de seguridad instauradas por el gobierno, cuya señal más visible es el despliegue de 10.000 policías y militares en las calles, estaciones y lugares turísticos.

El grupo Estado Islámico, que ha perdido casi todo el terreno que conquistó en Irak y en Siria donde proclamó un califato en 2014, amenaza a menudo a Francia en represalia por su participación en la coalición militar internacional que lucha contra sus combatientes en ambos países.

El EI llamó a atacar a los "infieles" en todas partes, y el grupo intenta exportarse en Europa gracias a los yihadistas que regresaron de Siria con el objetivo de realizar ataques en suelo europeo.

El anterior ataque reivindicado en Francia por el EI había tenido lugar en Marsella, el pasado 1 de octubre. Ese día, un tunecino de 29 años, Ahmed Hanachi, mató a dos jóvenes ante la estación Saint-Charles de la ciudad meridional al grito de "Alá Akbar", antes de ser abatido por militares.

Con información de AFP

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