El presidente Vladimir Putin ordenó “liquidar sobre el terreno” a los autores de atentados que pongan en peligro a las fuerzas de seguridad, después de un “acto terrorista” la víspera en San Petersburgo.
Aseguró que no descartaba ninguna pista pero que se abrió una investigación por “intento de homicidio” tras la explosión del miércoles por la noche en la segunda ciudad de Rusia, donde ya se produjo un atentado mortal el pasado abril.
“Se cometió un acto terrorista en San Petersburgo”, declaró Putin al comenzar una ceremonia de entrega de condecoraciones a militares rusos que participaron en operaciones en Siria.
El presidente anunció haber ordenado a los servicios de seguridad del país (FSB) “liquidar a los bandidos sobre el terreno” cuando sean detenidos en Rusia “en caso de amenaza a la vida o a la salud” de las fuerzas de seguridad.