Coyutla, Ver.– Los dos cuerpos hallados el pasado lunes con huellas de tortura en la localidad de Paso de Chicualoque, de este municipio, corresponden a los de una mujer y su hijo, vecinos de la Ciudad de México, que habían sido secuestrados.
De acuerdo con autoridades, las víctimas fueron identificadas como Manuela, de 36 años y Kevin Antonio, de 18, quienes regresaban a la Ciudad de México en un autobús, acompañados de dos menores de edad.
Ambos acudieron a un funeral a esta región serrana y el camión en el que viajaban fue interceptado por delincuentes en vehículos, que los bajaron con violencia.
Los dos menores quedaron a cargo del chofer del camión, en las inmediaciones de Lindero, en el estado de Puebla.
Después de haber sido privadas de su libertad, ambas personas fueron encontradas sin vida y con claras huellas de tortura.
Los cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo), donde fueron identificados por sus familiares.
La Fiscalía Regional realiza las investigaciones de rigor para proceder en contra de quienes resulten responsables.