Al menos cuatro personas murieron y seis más resultaron heridas tras ser atacadas a balazos en el poblado Tuzamapan, municipio de Coatepec. Los hechos ocurrieron ayer por la tarde y movilizaron a diversas corporaciones de emergencia, que no se daban abasto para atender a los lesionados.
Las autoridades presumen una venganza, pues de acuerdo con su versión una de las víctimas hirió horas antes al hijo de un delincuente que opera en la zona. Según los primeros informes, los infortunados fueron atacados en la entrada al pueblo, sobre la avenida Justo Sierra, donde hombres armados dispararon repetidamente en su contra con armas de grueso calibre.
Las víctimas, al parecer comerciantes, cargaban una camioneta con limón, cuando fueron alcanzadas por las balas. Los asesinos escaparon en dos vehículos sobre la carretera a Coatepec. Los cuerpos de los heridos y de dos fallecidos quedaron esparcidos sobre el asfalto.
El número de emergencias 911 recibió decenas de llamadas de auxilio. Paramédicos de diversas corporaciones de rescate, incluidos los bomberos de Coatepec, acudieron con ambulancias para atender a los sobrevivientes y trasladarlos de urgencias a nosocomios de esta capital y de Coatepec. Algunos de ellos se encuentran graves.
El tercer y el cuarto deceso ocurrieron anoche en el Centro de Alta Especialidad “Doctor Rafael Lucio” (CAE), de acuerdo con el último reporte de la SSP. Militares y policías implementaron operativos por tierra, mientras que un helicóptero de la Marina los apoyó por aire en busca de los asesinos.
En diversos puntos de la carretera y caminos vecinales los uniformados establecieron retenes, pero hasta el cierre de esta edición no se reportaron detenciones.
Peritos criminalistas realizaron las primeras investigaciones y ordenaron que los dos cadáveres fueran trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo), donde les sería realizada la necrocirugía de rigor. También recogieron al menos 50 casquillos percutidos en los alrededores, de calibre 9 y 7.62 milímetros. Algunos vecinos permanecieron a la expectativa cerca del lugar de la agresión, mientras tanto, hubo otros que de plano se refugiaron en sus hogares ante el temor de que pudiera registrarse otro ataque.