Un grupo grande de migrantes permanecen en los patios de Ferromex esperando a que los trenes se muevan en dirección a la frontera. Duermen sobre las vías y dentro de los vagones huecos donde colocan sábanas, lonas, sombrillas y todo lo que pueda bloquear los rayos del sol.
Son poco más de 2 mil migrantes que se esparcieron alrededor de las vías, tanto en las oficinas de Ferromex como a lo largo del tramo hacia el norte de la ciudad; entre las calles aledañas a las vías algunos chihuahuenses se dieron a la tarea de brindarles un espacio para descansar y facilitarles agua potable para beber y bañarse, así como comida.
Puedes leer también: Ferromex: ¿cuáles son las rutas de tren más utilizadas por los migrantes?
La mayoría de estas personas en situación de movilidad llevan poco más de tres días en la ciudad, y en más de una ocasión han expresado su frustración y angustia por no poder salir de la capital.
Algunos han decidido arriesgarse a caminar hasta Ciudad Juárez, sin embargo, los niños con los que viajan les puede dificultar el camino ante las altas temperaturas.
Hay personas que ya enfermaron por el clima cambiante de Chihuahua, donde llueve toda la noche y durante el día el sol quema como en el desierto, además de verse afectados por la deshidratación y desnutrición, lo que se ha convertido en una de las enfermedades más comunes entre los migrantes, en especial en los niños.
El grupo, que en su mayoría está integrado por personas originarias de Venezuela, escucharon que algunas organizaciones de la capital deseaban apoyarlos encabezando una marcha hacia el centro de la ciudad para exifgir a las autoridades que les permitan subir a los trenes.
“Mientras más presión sientan en Chihuahua, más rápido nos van a dejar pasar”, dijeron algunos de los venezolanos, quienes al ver la ausencia de las organizaciones decidieron realizar una reunión con la mayor cantidad de paisanos que puedan caminar para llevar a cabo ellos mismos la marcha hacia palacio de gobierno.
Publicado originalmente en El Heraldo de Chihuahua