Una fosa clandestina fue encontrada en el municipio de Palmar de Bravo, Puebla, gracias al trabajo del Colectivo Voz de los Desaparecidos y autoridades de la entidad. En el lugar hallaron de manera preliminar un cráneo e indicios de restos humanos, que resguardó la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición Cometida por Particulares.
“Encontrarlo vivo o muerto” es una frase dolorosa, pero recurrente entre los familiares de personas desaparecidas, ya que la incertidumbre de no saber su paradero a veces es insostenible. Los seres queridos se arman de valor y acuden a jornadas de localización para hallar indicios de restos humanos. Tal y como ocurrió la mañana de este viernes 2 de febrero.
El Colectivo Voz de los Desaparecidos acudió desde las 8:00 horas, a un terreno ubicado entre la autopista Puebla-Orizaba y Tehuacán-Oaxaca, dentro del municipio de Palmar de Bravo. En el lugar, encontraron un zapato (el cual fue resguardado por la FGE), un pedazo de playera que no tuvo indicios de sangre u olor fétido y, por último, “elementos positivos” (un cráneo).
La carretera está en proceso de construcción y los integrantes del Colectivo, comenzaron a cavar desde muy tempranas horas. Entre polvo, tierra y sus palas, solo existió la esperanza de encontrar algún rastro de lo que en algún momento fue una persona viva. Si tienen éxito, podría ser su hijo, su hermana o uno de los más de 3 mil desaparecidos, “cifra negra” que hay en el estado de Puebla.
Se vieron elementos de la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE), Comisión de Búsqueda de Personas, Guardia Nacional (GN) y la policía estatal. Todos ellos, escucharon las indicaciones o sugerencias del Colectivo, quienes ya tiene experiencia en el tema y fueron los que insistieron que se llevara a cabo la búsqueda.
En punto de las 13:00 horas, llegó una excavadora, y los integrantes le dijeron al operador el lugar exacto en donde debía de cavar por la textura del suelo. Mientras la maquinaria hacía su trabajo, el grupo también, pues no dejaron de escarbar de modo manual con palas y picos.
En cuanto encontraron un zapato y restos de tela, se acercaron a olerlos. Nunca imaginaron que podría diferenciar olores de la tierra, animales muertos y cuerpos humanos en estado de descomposición. En ambos casos no se pudo determinar si “era positivo”, es decir, si tenía olor a sangre o un cuerpo humano.
Después de que los picos salieron de la tierra, olieron las puntas, pero el resultado fue “tierra húmeda”. Durante el día hicieron pausas para descansar, para comer y hasta para contar anécdotas de sus familiares, recordarlos cuando no habían desaparecido y reír un poco en medio de una situación caótica. Aunque algunos elementos pidieron cesar la búsqueda, el Colectivo pidió seguir buscando.
Búsqueda da positivo a restos humanos
Para las 15:30 horas, los integrantes de la Comisión de Búsqueda pidieron al operador de la máquina que se detuviera, pues había algunos elementos “extraños” que tenían que revisar. Luego de acercarse y revisar, gritaron: “es positivo”. Retiraron lo que parecía ropa vieja y un cráneo.
Inmediatamente, elementos de la Fiscalía pidieron que todos los presentes se alejaran del lugar, que ya no tocaran nada, acordonaron el espacio y empezaron a resguardar lo que encontraron. En próximas horas, se sabrá todo lo que se encontró en el lugar.
Los integrantes del Colectivo se abrazaron, lloraron y compartieron lo siguiente: “Queremos agradecer a la vida, al día y gracias a todos los que nos acompañaron. Como saben, hoy iniciamos una búsqueda post mortem y todos los que estamos aquí somos testigos de que nuestra búsqueda ha dado resultados. Hemos logrado encontrar una fosa clandestina en el municipio de Palmar de Bravo”, externaron.
Detallaron que ya se encontraron los primeros hallazgos de cuerpos humanos y ahora, todo dependerá de la Fiscalía para determinar su identidad. Al preguntarles cómo se logró identificar el lugar, respondieron que gracias al trabajo de las familias y su “incansable” búsqueda para dar con sus seres queridos.
Cada día nos levantamos con la esperanza y nos acostamos con la fe de no rendirnos, porque un día vamos a encontrarlos a todos. Dicen que buscando se encuentra y hoy vieron que sí, se encontró. También hay que decirlo, contamos con el trabajo de la Fiscalía y la Comisión”, declararon.
Ante este hecho, el Colectivo Voz de los Desaparecidos pidió a la ciudadanía seguir compartiendo información, no importa que sea anónima, ya que cualquier dato, puede ser de gran ayuda para encontrar a más personas.
Historia de los familiares que acudieron
Dentro de los familiares que acudieron al lugar estuvo presente Rodolfo Larios, hermano de Guadalupe Larios, quien desapareció desde el 2018.
“Mi hermana salió de su domicilio en mayo del 2018 a las 7:45 de la mañana para llevar a mi sobrino a la escuela, ellos vivían en San Sebastián de Aparicio. En la esquina de la escuela fue interceptada por un sujeto, el cual le pidió que le ayudara a levantar a su mamá porque se había caído, ella le dijo que no porque se le hacía tarde, pero este tipo le dijo que le iba a pagar el taxi para que pudiera llegar a su trabajo a buena hora y cambió de opinión, es todo lo que sabemos”, relató.
Todo lo anterior, Rodolfo lo supo gracias a un testigo, pero la realidad es que no supieron que estaba desaparecida hasta las 20:00 horas, cuando una compañera de trabajo marcó para avisar que Lupe nunca llegó a su empleo
También acudió Martha Domínguez, madre de Carlos René Rojas Domínguez, quien desapareció a los 36 años mientras viajaba de Nayarit a Puebla, tomó una línea de nombre “Autobuses Coordinados de Nayarit ACN”, pero nunca llegó al territorio poblano.
Su madre, ha tenido que emprender su propia investigación para dar con su paradero, pues es como si la tierra se lo hubiera tragado y las autoridades no tienen ni una pista de su paradero.
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De igual modo estuvo presente Guadalupe Morales, madre de Brayan Torres Morales, quien desapareció el 23 de junio del 2023 cuando fue a visitar a su novia de 2 meses, Rosa Isela, ella vivía en la junta auxiliar de San Francisco Ocotlán, en Coronango. Hoy en día, ella es la principal sospechosa de la desaparición, sin embargo, la Fiscalía no ha dado con su paradero.
Nota publicada en El Sol de Puebla