CAMPECHE. Directivos y mandos medios de nueve municipios de Campeche se sumaron a la protesta que mantienen los policías estatales que exigen la destitución de la secretaria de Seguridad estatal, Marcela Muñoz, tras 10 días de paro de al menos mil agentes de un total mil 139, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Tras el fallido operativo en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Francisco Kobén el pasado 15 de marzo, policías se sumaron a la manifestación que existe desde el 16 del mes en curso otros nueve representantes de igual número de municipios, entre ellos seis policías terceros de Escárcega, Candelaria, Tenabo, Hopelchén, Dzitbalché y Hecelchakán, así como un comandante de Calakmul, el subdirector operativo de Calkiní y el director de la policía de Palizada.
El policía Fulgencio Pérez Novelo, uno de los manifestantes, comentó a El Sol de México que existen unas 800 demandas laborales y que se encuentran en paro alrededor de mil 100 agentes, pero aclaró que se trata de una “manifestación pacífica” ya que, dijo, cumplen con su servicio a la ciudadanía “pero sin ir a firmar a la nueva sede alterna en Lerma”, junta municipal perteneciente al municipio de Campeche.
“Damos servicio normal a la ciudadanía divididos en dos grupos de 24 por 24 horas, siendo 500 por cada turno, lo que suman mil en total”, explicó Pérez Novelo.
Según el Censo Nacional de Seguridad Pública Estatal (CNSPE) del INEGI, la cantidad de personal en las instituciones de seguridad disminuyó, pues mientras en 2021 contabilizaron mil 160 elementos, desde 2022 existen mil 139.
Campeche es la cuarta entidad del país con el menor número de personal en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana estatal, sin embargo, ocupa el sexto lugar con mayor número de elementos de la policía preventiva por cada mil habitantes, con 1.1, por arriba del promedio nacional de 0.9.
Policías y ciudadanos de Campeche han realizado tres marcha a favor de los agentes que están en paro y donde ahora no sólo piden la renuncia uncía de la secretaria de Seguridad, Marcela Muñoz, sino también de la gobernadora Laysa Sansores tras el fallido operativo de la policía estatal en el Cereso de Kobén en el que resultaron heridos varios agentes que no contaban con el equipo de protección necesario.