PUEBLA, Pue.- Entre 2012 y 2017 el robo de gas licuado de petróleo (LP) se disparó en Puebla en mil 120%, al pasar de cinco a 61 tomas clandestinas del primero al último de estos años y contabilizar un total de 213.
De acuerdo con datos revelados por Petróleos Mexicanos (Pemex), el hallazgo de perforaciones a sus ductos para la sustracción de este combustible se ha incrementado consistentemente durante los últimos seis años pues, mientras que en el año 2011 no había registros de estas, para el siguiente, es decir, en 2012, se encontraron las primeras cinco.
Desde las cinco detectadas en 2012, la incidencia de este delito se ha incrementado año tras año, pues, para el 2013 la cifra se triplicó a 16, mientras que para 2014 la cifra aumentó a 41; luego, en 2016, ascendió a 53 y, finalmente, el año pasado continuó a la alza hasta 61.
En total, durante este periodo Puebla contabilizó 213 tomas clandestinas para robo de gas LP que, en comparación con las primeras cinco descubiertas en 2012 y las 61 reportadas a 2017, representan un incremento de mil 120%.
Cada vez más
A la par, son cada vez más frecuentes los descubrimientos de tomas clandestinas para robo de gas LP en Puebla y contingencias derivadas de ellas.
El primer hallazgo de este año se produjo el pasado 14 de febrero, en el municipio de San Miguel Xoxtla, cuando elementos federales, estatales y de Seguridad Física de Pemex dieron con un supuesto baño, cuyo inodoro conectaba al ducto para el abasto ilegal del combustible.
La propiedad era una casa en construcción que a veces funcionaba también como establecimiento de lavado de autos, al que acudían hasta 10 pipas diariamente y del que se desprendía continuamente un fuerte olor a gas.
El pasado 18 de mayo, derivado también de denuncias ciudadanas, dieron con un predio en la junta auxiliar de Santa María Xonacatepec, del municipio de Puebla, que, aunque sus ocupantes defendieron como un taller de pipas, la gente de la comunidad la señaló como el punto de reunión de autotanques irregulares que abastecen del combustible, presuntamente robado, a otras de empresas regulares.
Y el pasado miércoles, dos hombres murieron intoxicados por inhalación de residuos de gas mientras limpiaban el interior de una pipa utilizada para la venta de combustible robado, según información proporcionada por la Dirección de Protección Civil del estado. Igual que en los casos anteriores, los vecinos acusaron que el predio aparentaba ser un taller pero que en realidad era el sitio en el que operaba una familia dedicada al robo de gas LP y venta irregular del combustible.